La industria constituye un componente destacado en la historia contemporánea de muchas ciudades españolas, que en las dos últimas décadas experimentó importantes transformaciones que han afectado de modo directo a esas áreas urbanas. Como respuesta al nuevo contexto tecnológico, la progresiva apertura e integración de los mercados, la difusión de formas de producción más flexibles y segmentadas o los cambios en el marco normativo, las empresas han modificado, tanto su funcionamiento interno como las relaciones con su entorno, con el consiguiente efecto sobre sus pautas de localización o los impactos generados sobre el territorio en que se asientan. Pero, más allá de ciertas tendencias estructurales, observables para el sistema industrial español en su conjunto, también son evidentes fuertes contrastes en la capacidad competitiva mostrada por regiones y ciudades que, en unos casos, vienen a profundizar tendencias anteriores, pero en otros suponen una novedad respecto a periodos precedentes que es necesario conocer y comprender para así poder actuar de forma más eficaz frente a los retos que imponen un presente cambiante y un futuro siempre incierto. Desde tal perspectiva, este libro aborda un análisis de la evolución reciente seguida por la actividad y los espacios industriales en las ciudades españolas, la modificación de los mapas industriales y su impacto en el tejido urbano, así como el resultado de las principales actuaciones públicas de promoción u ordenación emprendidas en estos años. Se trata de una obra sin precedentes en la bibliografía española, escrita por profesores de quince universidades y centros públicos de investigación, que aporta una perspectiva amplia, actualizada y abordada desde una metodología común, lo que permite su lectura desde diversas perspectivas complementarias. Tras una primera parte en que se propone una reflexión teórica sobre las nuevas relaciones entre la ciudad y la industria, se aportan numerosos estudios monográficos que incluyen a las principales aglomeraciones metropolitanas españolas, un buen número de ciudades medias y los principales ejes o corredores consolidados en las dos últimas décadas. En cada uno de los casos abordados, se recuerdan sus herencias industriales para centrarse luego en los cambios vividos desde los años ochenta del pasado siglo y finalizar con una revisión crítica de las políticas que han incidido sobre esta actividad. De la lectura de los diferentes capítulos, apoyada en una cartografía que ayuda a describir con precisión las tendencias espaciales, puede obtenerse una perspectiva sintética -pero también compleja- de un sector que vuelve a revalorizarse hoy como factor de dinamización y desarrollo tecnológico para las economías urbanas. La obra va dirigida a dos tipos de lectores. Por un lado, a los estudiantes universitarios que cursan materias relacionadas con la Economía Urbana, la Geografía Económica o el urbanismo, pues aportan conocimiento actualizado sobre una temática relevante en esas disciplinas. Por otro, a los profesionales de la Ordenación del Territorio, pues el catálogo de actuaciones y buenas prácticas que aquí se recoge puede resultar de utilidad práctica para quienes se enfrentan al reto de promover y regular la actividad económica en el interior de las áreas urbanas. Pero también puede ser una obra de consulta útil para todos aquellos que se interesan por las ciudades y los procesos que hoy las transforman, afectando de modo diverso el siempre difícil objetivo de mejorar su competitividad y la calidad de vida de sus ciudadanos.