La vicepresidenta segunda y titular de Vivienda del Gobierno de Navarra, Begoña Alfaro, ha declarado que para finales de este año será una realidad la rehabilitación integral y regeneración urbana del entorno del Horno de Coscolín de Tudela, lo que permitirá recuperar para la Ciudad uno de los espacios más degradados de su caso antiguo, mediante su integración en el tejido urbano a través de una plaza pública de 1.000 m2 y cuatro nuevos edificios que suman 24 Viviendas protegidas, que Nasuvinsa ha puesto en su totalidad a la venta.
La sociedad pública ha ejecutado el 60% de la intervención diseñada para Coscolín, según ha señalado la consejera Alfado durante su visita de hoy a la zona de obras, en la que han estado presentes el alcalde de Tudela, Alejandro Toquero; el director gerente de Nasuvinsa, Javier Burón; el arquitecto tudelano Curro Blasco, redactor del proyecto y director facultativo de las obras; los arqueólogos Juan José Bienes y Óscar Sola, responsables de las excavaciones; Yolanda Garbayo, gerente de Garbayo Chivite Construcciones, adjudicataria de las obras; así como de personal técnico de Nasuvinsa, como la arquitecta técnica Raquel López.
La reurbanización del entorno de Coscolín fue retomada por el Gobierno de Navarra en un protocolo firmado en 2017, que de esta manera puso fin a 20 años de espera y bloqueo de un proyecto de regeneración urbana y revitalización social llamado a recuperar esta parte del centro histórico de la Ciudad.
El proyecto que Nasuvinsa está ejecutando exige una inversión pública de 9,7 millones de euros, el 96% aportado por esta sociedad pública y el 4% restante por el Ayuntamiento de Tudela.
La consejera de Vivienda, Juventud y Políticas Migratorias, Begoña Alfaro, se ha felicitado por la materialización de este proyecto “cuyo éxito corresponde al empeño y trabajo de la sociedad pública Nasuvinsa, que va a permitir devolver el pulso urbanístico y social de esta parte del corazón de Tudela que ha sufrido un alto grado de deterioro durante más de 20 años”, ha señalado.
Ha añadido que esta intervención en Coscolín “da respuesta a la demanda de vivienda protegida de una parte importan de la sociedad de Tudela y de Navarra, y contribuye también a mejorar la calidad de nuestros espacios urbanos, de los servicios públicos y, en definitiva, de la calidad de vida de la ciudanía, que es en lo que debemos centrar nuestro trabajo como gestores públicos”, ha señalado la consejera.
24 VPO para venta, garajes y trasteros
La rehabilitación integral de la zona de Coscolín incluye cuatro edificios residenciales de nueva construcción situados en las calles Pontarrón, 7 y 9; San Antón, 16 y 24; y Plaza Vieja, 6. Además de locales en planta baja, se han habilitado en los niveles superiores un total de 24 Viviendas de Protección Oficial (VPO), todas ellas en régimen de compraventa para dar respuesta a la demanda preferente existente. No habrá vivienda en régimen de alquiler, como inicialmente se había estudiado.
Nasuvinsa ya ha puesto a la venta 12 VPO, a precios que oscilan entre 96.000 € y 160.000 €, dependiendo de su tipología, con posibilidad de que las personas interesadas puedan acogerse a la subvención del Gobierno de Navarra para vivienda protegida. Las 12 VPO restantes se ofrecerán a las personas interesadas que figuren inscritas en el censo de solicitantes de vivienda protegida y las que, en su caso, no resulten adjudicadas serán ofertadas esta sociedad pública mediante venta directa, como se ha hecho con las 12 VPO iniciales.
La tipología de las viviendas es uno, dos y tres dormitorios, con superficies que oscilan entre 46 m2 de la vivienda de un dormitorio y los 84 m2 de tres habitaciones, que en este último caso cuentan con salón de estar-comedor, cocina, baño, aseo y distribuidor, además del correspondiente trastero en el sótano, en el que se sitúa también el garaje, con 22 plazas.
Los pisos disponen de pavimentos de gres porcelánico, así como suelo radiante y sistema individual de aerotermia para calefacción y agua caliente sanitaria, además de ventilación mecánica con recuperador de alto rendimiento.
Las fachadas de edificio son de altas prestaciones de aislamiento, con sistema térmico SATE. Los pisos tendrán la calificación energética A, la máxima categoría en la escala de eficiencia, y contarán con carpintería exterior de aluminio con rotura de puente térmico y dobles vidrios y persianas de PVC de triple tabique o contra-ventana, así como puerta de entrada blindada.
Arbolado de gran porte
El nuevo espacio público de encuentro y relación vecinal tendrá cuatro accesos a través de pasajes peatonales desde las calles Pontarrón, San Antón, Mediavilla y Plaza Vieja, que mejorarán la integración y conexión con el resto de la trama urbana. Se contempla igualmente un ascensor urbano para salvar el desnivel con la calle San Antón.
Para la urbanización de la plaza se emplearán losa y adoquín en el pavimento, así como jardineras, bancos y árboles de gran porte.
Vitrina con material arqueológico
La intervención arqueológica y seguimiento en los denominados “solares del Horno de Coscolín” ha correspondido a Juan José Bienes y a Óscar Sola, de EIN Arqueología.
Entre los elementos recuperados en los trabajos de excavación destaca por su importancia un muro de sillares de época islámica, posiblemente fechado a principios del siglo X, que fue integrado en el proyecto de obra y que ahora ha quedado a la vista en su localización original, que coincide concretamente con la planta de garaje de los edificios junto a la calle Pontarrón.
Así mismo, en un espacio ubicado en la calle San Antón, próximo a la fuente del mismo nombre, se instalará una vitrina-escaparate con los restos hallados de mayor interés, tanto por su valor como por su significación histórica, por ejemplo, el suelo de cantos rodados de río, fustes de columna, piedras de molino, tinajas, etc.
Estos restos han sido sometidos previamente por EIN Arqueología a un proceso de consolidación y recuperación, siguiendo las directrices de la Institución Príncipe de Viana.