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on 20 May 2020 2:00 PM

Vivienda incluye en el Decreto de Ley Foral aprobado hoy nuevas medidas para ampliar la cobertura de las prestaciones a personas desempleadas y profesionales que hayan visto reducidos sus ingresos durante la crisis de la COVID-19

El Gobierno de Navarra ha decidido hoy ampliar las ayudas directas extraordinarias en materia de vivienda de alquiler y extender la cobertura a más familias o personas trabajadoras y desempleadas que tengan dificultades para abonar el arrendamiento debido a su merma de ingresos como consecuencia de la crisis de la COVID-19.

Concretamente, se extienden ahora las prestaciones para el alquiler también a profesionales autónomos –ya sea que hayan reducido su facturación o por cese de actividad- y a trabajadores y trabajadoras que sigan viéndose afectadas por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en sus empresas, así como personas que se encentren en situación de desempleo desde el pasado 1 de enero.

El Consejo de Gobierno ha aprobado en su sesión de hoy otro Decreto de Ley Foral con medidas urgentes y, entre ellas, incluye tres novedades concretas sobre la ampliación de las prestaciones extraordinarias para el alquiler de vivienda: su extensión a autónomos afectados por la crisis de la COVID-19 –tomando como referencia quienes se acojan a las ayudas extraordinarias que concede el Departamento de Desarrollo Económico y Empresarial-, también a aquellos trabajadores y trabajadoras que sigan estando incursos en algún ERTE -con la consiguiente reducción salarial- y en la cobertura a personas desempleadas la fecha de inscripción requerida se retrotrae al pasado 1 de enero -y no sólo desde el estado de alarma del 14 de marzo- al entender que la situación precaria que ya venían arrastrado se va a ver agravada en estas circunstancias por su dificultad en la búsqueda de empleo. En el caso de autónomos y ERTE, las ayudas para el pago del alquiler se prolongarán hasta el próximo 31 de diciembre y para las personas desempleadas, por un período de 12 meses.

El Departamento de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos del Ejecutivo foral ya se adelantó el pasado 25 de marzo –apenas diez días después de la declaración el estado de alarma- a aprobar las primeras medidas inmediatas y de urgencia para hacer frente al impacto que la crisis de la COVID-19 está teniendo en numerosas familias que atraviesan dificultades para pagar la renta de su vivienda de alquiler y, a la vista de las circunstancias, ha optado ahora por ampliar estas ayudas a otros colectivos.
Entre las medidas que han estado en vigor durante estos dos últimos meses, además del incremento de las subvenciones hasta el 75% de la renta con carácter general para todas las unidades familiares inquilinas de alquiler protegido que venían recibiendo estas prestaciones y la renovación automática de todos los contratos que venzan durante el período del estado de alarma, el departamento que dirige José Mª Aierdi también amplió los programas de ayudas EmanZipa y DaVid –que para los afectados por la crisis de la COVID-19 eliminan requisitos y se abren a todas las personas inquilinas de vivienda libre de alquiler por debajo de determinado nivel de ingresos- y, en el parque público de Nasuvinsa, ofreció condonaciones en el pago de las rentas de estos tres meses, a partir del estado de alarma y hasta julio.


“Valor de uso y función social de la vivienda”


“Cuestiones como la apuesta por el valor de uso y la función social de la vivienda, la necesidad de reducir el peso específico de los ingresos que las familias dedican al alquiler y de aumentar la oferta de vivienda asequible se hace más urgente y se pone todavía más de manifiesto en situaciones críticas como las que estamos actualmente viviendo”, ha explicado el vicepresidente José Mª Aierdi para justificar las medidas urgentes de ayudas directas para el pago del alquiler, sin perjuicio de otras estrategias que su departamento activará para introducir transformaciones en el mercado de la vivienda a medio plazo.

Entre todas las medidas activadas con carácter extraordinario, el Gobierno de Navarra ha atendido ya, desde la declaración del estado de alarma, a más de 2.000 familias inquilinas de alquiler, entre subvenciones en el régimen protegido y ayudas directas en vivienda libre. Entre ellas, la concesión de ayudas en los programas de atención al derecho a subjetivo a la vivienda EmanZipa y DaVid –que cubren hasta el 50% del pago de la renta hasta determinado nivel de ingresos- han ido creciendo durante estos últimos dos meses hasta las 396 ayudas, de las cuales 244 (el 60%) han estado directamente relacionadas con dificultades para pagar la renta por merma de ingresos como consecuencia de la crisis de la COVID-19.

Las cifras de estos dos programas acumulan ya en lo que va de año más de 2.570 ayudas concedidas a personas jóvenes y familias vulnerables para el pago de las rentas de vivienda de alquiler, más de 2.000 en el programa EmanZipa y el resto, a través del DaVid.